Falleció ayer (miércoles 9), en Recife (Brasil),
el percusionista Naná Vasconcelos (Juvenal de Holanda Vasconcelos). Tenía 71 años y murió a causa de un cáncer de pulmón. Una pérdida dolorosa, no sólo por su aporte a la música y a la cultura pernambucana, sino también como ejemplo de vida. Sus últimos años los dedicó en buena medida a
rescatar en su ciudad natal niños de la calle a quienes les daba un lugar de contención a través de la música. Solía decir: “La niñez de la calle te hace ser nadie y la música, en cambio, nos da una identidad”.
Naná fue un niño de la calle y esa experiencia era el punto fuerte de su historia de vida. Leer nota completa
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