Tienen 15 años de carrera, un sonido que los define y un público leal que los sigue a todas partes y que hace de cada recital una ceremonia. Nunca pensaron en hacer otra cosa que música latinoamericana, pero hace 15 años, cuando comenzaban a transitar los escenarios, muchos intentaban definir el género.
¿Qué hacen: folklore o rock? Pero hoy, después de años de carrera, siete discos, un premio Gardel y una Consagración en Cosquín, nadie se atreve a hacer esa pregunta. Leer nota
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