¿Qué es más difícil, arrancar de cero o iniciar un proyecto con la mochila de haber liderado una banda que reventó estadios con sus rituales? En mayo del año pasado, Los Piojos reventaron River por última vez, el último acorde de una historia más que fecunda que visitó todas las estaciones, del barcito al teatro, del teatro a Obras, de Obras al rock de masas. Pero todo eso empieza a virar al sepia, un tono que contrasta con los mil colores de la tapa de Espejos, el primer disco de Ciro y Los Persas.
Leer nota
No hay comentarios:
Publicar un comentario