El polifacético artista explica que Al alba nunca fue una canción política, sino una declaración de amor. Echa en falta música honesta para ser y no para vender. Cuestiona al sector internauta porque "todos" usamos la red.
¿Cree que la música que ustedes utilizaban para criticar al poder se ha rendido al sistema?
No me gusta generalizar, hay de todo, pero lo más normal ahora es hacer música para venderla. Se hacen canciones de consumo fácil. Nosotros intentábamos hacer buenas canciones, bien escritas, no sabíamos si iban a ser comerciales o no. Lo curioso es que ahora se hacen canciones para vender discos que tampoco se venden. Leer nota
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