sábado, 29 de agosto de 2009

Fogwill versus Fogwill

Discípulos: hace muchos años que tengo un solo alumno. Casi nunca falta, siempre paga y parece ir envejeciendo a la par mía. Soy yo, su manager, mi preceptor, su personal trainer, mi mentor secretísimo. Le enseño y él aprende y olvida a la par. Le digo que mi maestro anterior estableció que escribir es filmar directamente contra la pantalla. Y tratando de que filme directamente contra su pantalla le repito que, de ahora en más, escribir, para él, será conseguir que cualquier cosa que se le vaya ocurriendo pase directamente al texto sin romper su ilusión de continuidad. He tratado por todos lo medios que aprenda a oír a la gente haciéndose escuchar. Creo que ya casi aprendió a poner títulos a sus sonetos y sus letras de rock. No es nada fácil. Leer nota

No hay comentarios:

Publicar un comentario