Un encuentro con Philip Roth en su casa de Upper West Side, un departamento de una elegancia ascética e inesperadamente lleno de aparatos tecnológicos. Acaba de llegar de su otra casa, en Connecticut, donde pasó el verano terminando una nueva novela, que pronto saldrá en los Estados Unidos con el título The Humbling, y a iniciar uno nuevo, que todavía no tiene nombre. En el curso de este encuentro me explicó que siente el peso de la vejez y un vacío por los sueños traicionados y las personas que desaparecieron. Leer nota
No hay comentarios:
Publicar un comentario